SÁBADO POR LA TARDE
(Liam ^____^)
-¿Qué podríamos hacer para comer?- me preguntó apagando la
Wii, nos habíamos pasado todo el rato jugando después de dos horas limpiando el
garaje.
-Lo que se te ocurra. Hacemos espaguetis, o pizza, o
hamburguesas.- le sugerí.
-Creo que sí que tengo de todo. ¿Las hacemos con queso?,
¿vegetales?, ¿le hecho de todo?
-¿Le hechas?, crees que me voy a quedar aquí de brazos
cruzados entonces.
-No lo sé.- subió a la cocina.
-¡Jane!.- corrí tras ella. Abrió el frigorífico y sacó dos hamburguesas y del congelador una bolsa de patatas, apartó unas pocas en un
plato y volvió a guardar la bolsa.
-Haz tu las patatas y mientras yo las hamburguesas.
-Eso está hecho, pequeña.
Me puse a su lado, pero en la otra parte de la
vitrocerámica. Agarré una de las palas de madera.
-Coge la cuchara mejor.- me sugirió.
-No lo creas.- dije metiendo la pala en la sartén para
moverlas.
-¿Qué pasa?
-Que no me gusta usar cuchara.
-¿Y la sopa te la comes con…?
-Calla y mueve esa hamburguesa, se te va a quemar.-le dije
señalando la más pequeña.
-¡Mierda!, ¿todo sale mal o qué?.- le dio la vuelta rápido
pero algo de aceite salto y Jane se quemó en la muñeca.- ¡Auch!
-Uff.- suspiré.- todos los golpes te van allí.- era la misma
que se había lastimado la primera vez que nos chocamos.
-Sí, pero esta vez no aprietes anda.
-En estos casos se suele echar sal.
-No, que escuece.
-Y cura.
-Eres como las abuelas.
-Pero llevo razón.
Pusimos la mesa y empezamos a comer.
-Entonces, hablabas de mi cuando estabas en WhatsApp con
Marie.-tosí para no atragantarme.- es que te la tenía que devolver, la del
garaje.
-Bueno, supongo que sí.- dije sin mirarla a la cara.- aunque
sigo sin entender porque dijiste que no tenías novio.
-No tenía idea de quien eras, ¿y si fueras un loco?, le
estaría contando cosas de mi vida privada. En cualquier caso, quiero que sepas
que me alaga.- se levantó para ir a por agua.
-¿El qué?
-¿Gustarte?
-¿Tu a mi?
-Va, no te hagas ahora el loco Liam. Te lo repetiré hasta
que me canse, eres un sol.
Sonreí y me levanté. Fui hacia ella.
-Pero, ¿sabrás que tu también te delataste no?, ya que me
afirmaste que te gustaba.- ella cerró la nevera y al girarse se encontró frente
a mí.
-Sí. Pero a ver, una cosa es decir que te gusta alguien y
otra un famoso. No creo que sea lo mismo.
-¿Insinúas que Amy no está enamorada de Louis?
-No, Amy si que esta enamorada.
-Ella si puede enamorarse de su ídolo, pero tu no puedes aceptarme
ahora mismo que te gusto aunque sea famoso.
-No he dicho eso.
-Ya, ya.
Me giré. Agarró mi mano y me di la vuelta.
-Liam, por mucho que creas que soy igual que todas las
chicas. No es así. No olvidaré a Mark de la noche a la mañana. Realmente ahora
mismo hay miles de tías suspirando por ti. Pero por mi solo lo hacía él, o
bueno, eso creía.
-Vale, vamos a cambiar de tema anda.
-Sí, mejor.- dijo sacando dos yogures del frigo.- ¿quieres?.- negué y guardo uno.
-¿Y si en vez de una de risa hoy vemos una de miedo?
-Veras, tengo que estudiar para unos exámenes. Pero justo
cuando termine hago lo que tu quieras.- dijo mientras llegábamos a su
habitación. Le miré extrañado.
-¿Lo que yo quiera?.- me tiré en su cama y me insinué,
reaccionó mal así que paré la broma.
-Ahora todos los tios me verán como una chica fácil.- se
sentó y abrió un libro.
-Lo siento, estaba de broma Jane.
-¿Y que crees que le habrá dicho Mark a sus amigos?
-No lo sé.
-Pues les habrá contado todo, yo quedo como una guarra y él
como un campeón.
(Jane ^____^)
-No es ningún campeón. No se ha quedado con el premio si es
así como te ves ahora mismo.
Se tiró en la cama y se quedó mirando el techo.
-Justo eso. Y gracias.
-De nada. ¿Te molesta que me ponga a escuchar música
mientras estudias?
-Para nada.
Me puse a intentar concentrarme en mis apuntes de historia
mientras me repetía a mi misma las cosas. Mi móvil sonó, Liam no se dio cuenta.
Era un mensaje.
-“Sabes que te quiero, lo siento mucho.”
La verdad, me sorprendió. Dejé el móvil en la mesa, iba a ser imposible concentrarse, lo puse en silencio.
Pasaron unas dos horas, cerré mi libro de matemáticas, con
el cual había estado haciendo ejercicios. Liam estaba dormido, con los cascos
en la cabeza, una mano la tenía en su barriga y otra en el pelo. La verdad es
que era bonito. Sí, su pelo era bonito. Lo llevaba rizado, era como mejor le
quedaba. Recé por que no se despertara y me puse a tocárselo, que suave. No se
inmutó. Estaba mono dormido. Pillé mi cámara de fotos y le hice un par.
Le deje descansar y me fui al ordenador, conecté twitter,
iba a ser la primera vez que le buscaba.
“Liam Payne”
Miré en el lateral y aprecio la foto, el tic de verificación
y el twitter. Me puse a leer los twwwts que le enviaban.
“Por favor, sígueme”, “Liam eres perfecto”, “Liam… te
quiero, te quiero muchísimo”, “Me encantas pequeño”, “Tu voz es hermosa”
-Joder, como son las fans de este tio.
-Pues perfectas y con muy buen gusto.- apareció despeinado y
se apoyó en el marco de la puerta.
-Ya veo, ¿has dormido bien?.
-Sí y por cierto, guarda bien las fotos.
Chasco, me había pillado.
(Liam ^___^)
-¿Has elegido ya la película de miedo?
-Esto… ¿iba en serio?
-Pues claro.
-Vale, ¿cuál?.- Preguntó.
-Hay una nueva, o bueno casi nueva que se llama Intruders.- su rostro cambio.- ¿he dicho algo malo?
Negó con la cabeza.
-Tardará una media hora en descargarse.
-Tengo paciencia.
Me sonrió y mientras comenzaba a descargar la película puso
youtube.
-¿Qué quieres ver?.- le pregunté.
-Pues me odiaras más todavía pero nunca he visto un vídeo de
una actuación vuestra.
-Entonces mentiste cuando dijiste que vistes, cry me a
river.
-¡No!, ¡No, que va!.- empezó a ponerse nerviosa y a tocarse
mucho el pelo.- Amy me obligó, bueno, mejor dicho me lo sugirió y acepte para no
parecer borde.
-Entiendo. Pues hay unas cuantas actuaciones, ¿cuál quieres
ver?
-La que cantaste, la que cantasteis ayer.- dijo
corrigiéndose.
-Eclipse total al corazón.
Asintió.
Acerqué una silla y me senté a su lado. Lo escribió en la
barita de búsqueda.
-¿Y ese maquillaje?
-Era Halloween.
-Mmm, mañana hará un año.- lo había parado para que se
cargara mientras señalaba la fecha de subida.
-Ah, pues sí.- dije haciéndome el loco.
Le dio al play y vio la actuación muy callada, me miraba y
acto seguido sus ojos volvían a la pantalla. No dijo nada acerca del vídeo, se
limitó a preguntar canciones al azar por si las teníamos.
-¿Qué te crees, que hemos versionado todas?
-No se, por probar.
-Pues mejor pregúntame y te digo si esta o no. Que pareces
tonta.- le revolví el pelo.
-Vale, pero seguro que dirás que no.
-Inténtalo.
-¿Teenage
dream?
-No.
-¿¡Ves!?...
lo intentaré con algo de Rihana.
Dijo otra, como no era only girl in the world, negué con la
cabeza.
-¡JO!
-Cambiemos el juego. Yo te preguntó y me dices si te gustan.
-Sí mejor,
terminaremos antes.
-She is the
one, de Robbie Williams.
-Bueno, esta bien, pero…
-Vamos que no es de tus favoritas.- wlla asintió.- ¿alguna
de Muse?
-Sí.
-Pues no tenemos ninguna.
-Pues podríais.- me pegó en el brazo.
-Vale, tranquila.
SÁBADO POR LA NOCHE.
-Esta empezando a anochecer.- me dijo.
-Pues sí que he dormido yo.
-Y tanto, te has quedado sopa en cuanto me he puesto a
estudiar.
-¡Ya se!
Busqué la actuación de, the way you look tonight.
-Esa me gusta.- dijo mientras yo terminaba de escribir,
cuando agarré el ratón ella lo había cogido antes que yo, así que me dirigí al
enlace sin soltarla.
Al terminar mi parte y antes de que Harry pudiera seguir
cantando lo paró.
-¡Pero que monada!
-Gracias...¿supongo?
-Sí, porque es verdad. Me arrepiento de no haberle hecho caso
a Amy cuando me daba molestaba con Louis. Te hubiera encontrado antes.
¿Iba con segundas?
-Oh no. ¿Y si no hubiéramos chocado?
-Nos habríamos visto la noche de los premios.
-¿Y si no te hubieran cogido y cogen a otra?
-Bueno pues entonces lo que ha pasado lo ha fabricado el
destino.
-¡Ja!, el destino es una tontería.- le contesté.
-Nunca digas eso, yo lo dije, una vez, y me di de bruces con
el gilipollas de Mark.
Le di un golpe suave en la cabeza.
-¿Qué?
-No vuelvas a nombrarle porque estaré haciéndote cosquillas
hasta que ya no puedas más.
-Nada que decir señoría.- Me respondió.
(Jane ^____^)
Pusimos la película en el DVD, él se puso en un lado del
sofá y yo en el medio. Por mucho que no lo quisiera había visto esa peli con
Mark así que me acordaba mucho de él. En ningún momento quiso agarrarme ni
pegarse a mi si quiera, Liam sólo se limitaba a ver la película. Cuando me di
cuenta de que venía la parte que más me había asustado me pilló de sorpresa por
muy esperada que ya la tenía, así que sin quererlo pegué un grito y tapé mi
cara con las manos, me hundí en mis rodillas.
-Qué chica más cobarde.
Pasó su mano por mi hombro y me atrajo a él. Hundí mi cabeza
en su pecho y con la otra mano terminó de abrazarme. Olía muy bien, me
encantaba su colonia.
-No soy cobarde, es que la escena es asquerosa y horrible.
Me avisas cuando termine.- me agarró más fuerte aun.
Se quedó callado y al minuto o así habló.
-Ya ha pasado todo.
-¿Eh?.- me soltó y volví a ponerme como antes.- me has
avisado.
-Porque tu me lo has pedido.
-Claro, pero creí… bah, déjalo. Gracias por avisar.
Volví a asustarme en otra escena, una que no había llegado a
ver en la otra ocasión.
-¡Ooooh!, pero no te metas ahí.- le grité al
televisor.-¡AAAAH!
No me dio tiempo a taparme la cara, Liam estaba poniendo sus
manos para impedirme visualizar la escena, apreté fuerte sus manos.
-Tranquila Jane. Estoy aquí, junto a ti, no más miedos,
¿vale?.
-Sabes que si dijeras eso cantando se llamaría, gotta be you,
¿verdad?
-Cierto.- quitó sus manos de mi cara y me propuso con gestos
recostarme sobre él. No se en que momento me quedé dormida pero cuando desperté
la película seguía.
-Lo siento, me he quedado dormida.
-Has estado 2 horas o más estudiando. Lo mereces. No pidas
disculpas. ¿Cenamos?
-¡CENAMOS!.
Sonó el timbre, abrí y un hombre oriental estaba en la
puerta con un paquete.
-Lo siento, no he pedido comida china.
-¡Pero yo sí!.- gritó Liam.
-Pero él sí.- dije.- ¿Cuánto es?.- cogí la comida y me giré
sonriendo.
-Treinta libras.- dijo el hombre.
Liam salió y le pagó, le despidió pero el hombre hablo una
vez más.
-¿Usted canta en un grupo?
-Sí.- dijo Liam tímido.
-No se tu nombre, tampoco el del grupo, pero tu cara me
suena y creo que a mi hija la tenéis loca. ¿Le firmarías un autógrafo?
-Oh, sí, por supuesto.- que gracia había firmado en la
libreta de los pedidos.
-Gracias...- el hombre miró la libreta.- Liam.
-De nada.- cerró.
-¡Liam Payne se pone nervioso cuando le reconocen!.- grité y
eché a correr.
-¡Te vas a enterar!
Me agarró y me tiró al suelo, me paralizó las manos cuando
se puso encima de mi. No supe reaccionar.
-Y tu te pones nerviosa cuando yo te agarro.
Se levantó y se fue a la cocina. Pusimos los cubiertos y
empezamos a comernos la comida china.
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