CAPÍTULO 33

-A ver, por algunas razones Amy esta depre y a Louis creo que le gusta, Amy, no que este depre, así que la ayuda a salir del paso.

-Nuestro Louis, todo un caballero.- dijo Niall.

-¿Y qué le pasa a Amy?- pregunté.

-Sí la verdad es que Amy tiene suerte.- añadió Zayn.

Gracias por pasar de mí chicos.

-Se supone que harán una fiesta las chicas.- intenté intervenir de nuevo.

-Sí, se la están preparando a Jane.- dijo Harry.

-Menos Victoria, lo que me recuerda a que está enferma en casa y que he pensado en ir a visitarla.

-¿Qué le pasa?- pregunté.

-Tiene fiebre y no para de toser.

-Ah ¿y Amy esta triste por eso?- volví a intentarlo.

-Bueno, dale recuerdos de todos.- dijo Zayn.

Ni puto caso.

(Niall ^____^)

Estaba seguro de que no me había equivocado. Ese era el barrio de Victoria. Encontré la fila de casas de la 1 a la 20, genial , el suyo era el 48, estaba por la otra calle.

-¡Niall!- gritó alguien. Antes de poder reaccionar había cuatro chicas a mi alrededor con cámaras de fotos.

-Vale, vale, tranquilas.

-¿Podrías firmarme un autógrafo?- dijo la que parecía más pequeña, unos doce años.

-Claro, pero tengo prisa eh, ¿y el boli?- dije con una sonrisa.

Me lo tendió y le firme, en el bolso. Raro pero cierto. Me despedí y me fui. ¡48!.

Toc, toc.

Victoria tardaba en abrir. La puerta se movió.

-Hola, ¿quién eres?

Supuse que era su madre.

-Usted debe ser la señora Thomas, soy… yo soy un amigo de Victoria, me he enterado de que esta enferma y me he pasado a visitarla.

-Oh, sí, soy su madre. Su habitación está arriba.

-¿Cuál…?

-No tiene perdida, pone su nombre en la puerta.

-¡Gracias!, por cierto, soy Niall, Niall Horan.

Subí y vi la puerta. Toqué y no abría nadie, volví a tocar y abrí. Estaba en pijama, unos pantalones cortos azules y una camiseta de manga larga blanca, por detrás se leía. “I BELIEVE I CAN FLY”. Tenía los cascos puestos y no paraba de bailar, cantaba el estribillo de, All you need is love, y empezó a decir la parte que me había tocado a mi en la actuación de Factor X. “There´s nothing you can know that isn't known”, antes de que siguiera yo ya había cerrado la puerta y estaba a su lado, le quité los cascos y le dije, “There´s nothing you can see that isn't shown”.

-¡Aaaah!

-Gritona.- dije mientras la abrazaba desde atrás, pude oir que estaba escuchando nuestra versión de, All you need is love.

-¿Qué haces aquí?- preguntó nerviosa.- mira que pintas, si voy despeinada, joder tengo ojeras.- se miró al espejo.

-¿Qué dices?, estas preciosa, como siempre.

-Niall Horan ahora es un mentiroso.- dijo golpeándome el brazo.

-¿Qué tal te sientes?

-Ahora mismo, mejor que bien.

Pillé la indirecta.

-¿No tienes fiebre?- dije levantándole el flequillo, estaba caliente.

-Ya no tanta, mañana creo que iré a clase, es más lo estoy deseando para separar a esos dos.- tosió.

-Primero mejórate y ya después vuelves a clase.

-Mmm, estoy mejor.

-Bueno a medias.

-Estaba a medias, pero con los deberes de lengua.

-¿Te ayudo?

-¿Cuánto tiempo piensas quedarte?

-Lo que haga falta, he quedado con los chicos a cenar pero si quieres lo cancelo.

-No, claro que no, con que te quedes un ratito me haces feliz.

Le ayudé con un par de ejercicios y nos pusimos a ver una película, era de baile y por lo que había comprobado algo que a Vic se le daba bien. No sé en que parte estábamos pero había una escena con una música muy lenta.

-¿Lo intentamos?- le dije desde el otro lado de la cama tendiéndole la mano.

-Niall, pero están mis padres abajo y además ni si quiera nos hemos… bueno…

Flipé, la fiebre le afectaba de verdad.

-Me refiero a bailar como ellos, ¿quieres probar?.

-Ah, ¿bailar?- lo entendió.- Bueno, sí, claro que sí.

Me dio la mano y la ayudé a levantarse, me fijé en como el chico de la película la cogía de la cintura y le imité, ella puso sus manos en mis hombros entrelazándolas por detrás.

-Sólo por despejar dudas, ¿a qué te referías con ni si quiera…?- pregunté, se puso más roja de lo que ya estaba.

-A que…

-¿A qué?, no puede ser tan malo, suéltalo.

-A que en las demás citas ni si quiera nos hemos besado.

Comenzó a apartarme la mirada.

-Que no estoy diciendo que no quiera, que no se si quieres, pero no se, que creía que querías que pasara otra cosa y he reaccionado así.

-Tranquilízate. No queremos que te vuelva a subir la fiebre.- la agarré más fuerte y le di un giro.

-Si me sigues agarrando así voy a volver a los 39 grados.

-Menos mal que eras cortada.

-Sí y recuerdo que te dije que me ponías nerviosa.

-Ay mi niña tímida.- dije apoyando mi frente en la suya.

-¿Mi?- me miró ilusionada.

-Sí, mi.

-No es justo, tu no eres mi nada entonces.

-I´m yours…- le canté.

-Woooow, imaginaba que eras dulce no que llegaras a tanto.

-¿Entonces puedo hacer esto?- le besé en la frente y ella asintió.-¿Y esto?- le besé en la comisura de los labios.

-Sí pero no quiero enfermarte.

-Vaya y yo que quería dar el tercer paso.

-Pues entonces lo siento si mañana amaneces con 40 de fiebre.

Sonreí y le besé, fue muy tierna, no había soltado mi cuello en todo ese rato excepto ese momento que tenía, una mano en mi mejilla y otra en mi pecho. Cuando nos separamos no podíamos dejar de sonreír.

-¿Qué tiene de interesante tu mano ahí?

-Noto el latido de tu corazón.- me respondió.

-Oh, bueno, será la única cosa que te guste en mi.

-¿Por qué dices eso?

-¿No iras a decirme que te has fijado en mi por mi sonrisa?

-Básicamente y tus ojos también ayudan.

-Mmm…- iba a hablar pero me cortó.

-Y tu manera de actuar, que me haces reír y que me acabas de decir que eres mío. Yo amo tu sonrisa.

-No es bonita.

-Lo que yo diga, hoy vas de mentiroso.

-Victoria.

-¿Niall?

-No es eso.

-Es eso. Me encantas rubio y si tu a ti mismo no, es que eres idiota. ¡IDIOTA, IDIOTA!

Me besó.

-Esto no es justo, me declaro y me llamas idiota.

-¿Declararte?

-¿No vas a salir conmigo entonces?- abrió los ojos de par en par.